5/05/2015

IMÁN

Eres como un imán
al que un relámpago cargó su fría alma de hierro.
Seducir polos opuestos y rechazar semejantes es tu juego,
mientras pasas indiferente entre los que para ti no se hicieron.
Aquellos a los que nada 
puede hacer 
que los ames o desprecies.
Pero también he visto tus malos momentos

cuando tu cuerpo vacío ya no tiene fuerza
y eres sólo un trozo de metal inerme.
Entonces te acercas a mí
para cargar otra vez tu ánima
y volver a tu juego.
Mientras yo me quedo exhausto
esperando un rayo que me alcance
y me haga ser como tú.




No hay comentarios:

Publicar un comentario